Gripe Gripe

La influenza es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa causada por tres tipos de virus de la influenza: tipo A, B y C. tipos A y B a menudo causan brotes generalizados anualmente, mientras que el tipo C generalmente se presenta en casos esporádicos o brotes. De vez en cuando, una pandemia de influenza (un brote global) ocurre cuando un nuevo virus de la gripe provoca enfermedades humanas graves y se propaga fácilmente de persona a persona.

El Tipo A se caracteriza por las designaciones “H” y “N” (por ejemplo, el recientemente identificado porcina H1N1 o los virus H5N1 aviar), que representan a las proteínas en la superficie del virus. Estas proteínas permiten que el virus entre a las celulas. Mutaciones frecuentes en estas proteínas permiten que el virus cambie rápidamente para evitar la inmunidad acumulada durante la anterior temporada de gripe. Tres o cuatro pandemias han ocurrido cada siglo desde el siglo XVI. La primera pandemia del siglo (1918) fue el resultado de la rápida propagación de la nueva cepa de H1N1 (gripe porcina).       

Hay cierta preocupación con respecto a la posible transmisión de la gripe aviar (ave) a la gente.  Si bien esta cepa de gripe es encontrada solo en las aves de corral y aves acuáticas silvestres, hasta ahora han habido sólo algunas infecciones humanas en todo el mundo, por lo general resultantes de que tienen contacto muy cercano con aves de corral enfermas. 

La gripe es una enfermedad grave porque rápidamente puede convertirse en una epidemia y extender se por todo el mundo como una pandemia. En ancianos apartir de los 65 años de edad que tengan enfermedades inmunosupresoras crónicas de corazón, pulmón, riñón o enfermedades, hay una alta tasa de mortalidad. 

Dado a que la gripe provoca tanta tan alta tasa de mortalidad y graves pérdidas económicas, muchos países cumplen con una rutina de vacunación anual contra la gripe.  La vacuna se recomienda especialmente para los ancianos y las personas con enfermedades crónicas pasadas.  Debido al costo y producción limitada a nivel mundial, sin embargo, la vacuna generalmente no está disponible en los países en desarrollo.

Cuando aparece un nuevo virus gripal, los seres humanos son generalmente susceptibles a la infección del virus de la gripe. La infección produce inmunidad al virus infeccioso específico, pero esta inmunidad es muy limitada, ya que el virus de la gripa va mutando todo el tiempo, y es posible que uno se contagia de un nuevo brote de virus cada año Por lo tanto, es posible que esté infectado con la gripe cada año. Cuando aparece una mutación donde dos virus se combinen, como es el caso de la nueva cepa de H1N1 (gripe porcina), esto se convierte en un problema global.

Los síntomas son similares para todos los tipos e incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y de articulaciones, fatiga y tos. Los Vómitos y la diarrea pueden acompañar a los síntomas respiratorios. Los síntomas pueden variar de leve a moderadamente grave dependiendo del tipo de virus y el tipo de virus que este contagiando a la comunidad.

Los síntomas de la gripe pueden ser muy similares a muchas infecciones respiratorias que se producen en la temporada de invierno, como el resfriado común. Sólo una prueba de laboratorio puede confirmar que los síntomas son realmente el resultado de una infección con el virus de la gripe.

Mientras que la infección con el H5N1 aviar ocurre raramente, esta causa una enfermedad respiratoria severa, esta viene con una severa dificultad para respirar y una alta tasa de mortalidad (llegando hasta el 70 por ciento en algunas zonas).

Las medidas de apoyo y tratamiento de los síntomas para reducir la fiebre y mantener la hidratación adecuada están generalmente disponibles. Hay varios fármacos antivirales (por ejemplo, oseltamivir, conocido como Tamiflu y el zanamivir, conocido como Relenza) que pueden acortar la duración de la enfermedad y su gravedad. Para ser efectiva debe tomarse al primer signo de cualquier síntoma en una persona expuesta. Porque el virus puede desarrollarse rápidamente y obtener resistencia ante estos medicamentos, que son generalmente reservados para el tratamiento de personas con la enfermedad ya muy avanzada y corran peligro, especialmente aquellos con enfermedades crónicas pasadas.

Estos fármacos también pueden prevenir la enfermedad si se toman antes de la exponerse al virus.  En la mayoría de los casos, se recomienda el uso profiláctico de estos medicamentos para las personas, como trabajadores de salud, que puedan estar expuestos repetidamente durante una epidemia de la gripe.

La gripe es una enfermedad estacional y ocurre en cualquier país del mundo como brotes o epidemias y generalmente pasa durante la temporada de invierno.